Una impresionante tormenta de arena sorprendió este jueves a miles de habitantes de Ica, cubriendo el cielo de polvo y reduciendo drásticamente la visibilidad en localidades como Parcona, Pisco, Nasca y Palpa. El fenómeno fue provocado por los intensos vientos paracas, que alcanzaron velocidades de hasta 40 km/h, obligando a suspender actividades al aire libre y cerrar caletas pesqueras.
Según el Senamhi, estos vientos son típicos de la costa sur peruana y se intensifican por el contraste térmico entre el océano y el desierto, especialmente durante los meses de invierno. Aunque no se reportaron daños personales, las autoridades emitieron una alerta preventiva vigente hasta el 3 de agosto, recomendando reforzar techos y evitar salir de casa.
El evento generó gran impacto en redes sociales, donde usuarios compartieron imágenes del cielo anaranjado y calles cubiertas de arena. Expertos advierten que este tipo de tormentas podrían repetirse con mayor frecuencia en los próximos días, afectando el turismo, el comercio y la salud pública.
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